Sin Fulgor

Las trompetas declaran sin rubor:
“Ungimos una niña con la gloria”.
En la tierra quedaron sin fulgor
los mecheros que faltan de la historia.

Sin la rosa la espina es dolor,
hace mellas que muerden la memoria,
es luto y en su pérfido rencor
en el alma descubre su victoria.

Guardarlas en el cofre más sagrado
podría del amor todas las penas,
devolver libertad al condenado

con un cesto de flores nazarenas,
suprimir de los siglos el pasado
y aún seré lo rojo de sus venas.

José Vidal – Pepín 2007 ©

email:  jvidal77@hotmail.com

Gracias por la visita.

 

 

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